domingo, 2 de septiembre de 2007

LAS VIEJAS BANDERAS Y EL NECESARIO VIENTO NUEVO

En la mitad del período de gobierno, todo parece indicar que la gente no puede salir del clima de desilusión que la izquierda alimenta día a día con sus errores, sus horrores, su autoritarismo y el divismo de sus autoridades, que están más preocupadas por ver quién se posiciona en la interna frenteamplista que por dedicarse realmente a gobernar. A eso debemos sumarle el comienzo del desfile por los juzgados que le espera a este gobierno, con el Sr. Bengoa como adelantado.
Este escenario plantea una inminente alternancia en el gobierno, y posiciona al Partido Nacional como el próximo elegido para esa tarea. Ante esta perspectiva, debemos más que nunca ordenar la casa, para condicionarla a la nueva tarea que se viene.
Analicemos los puntos a favor. El Partido ha iniciado un sano proceso de renovación, que ha comenzado desde su liderazgo. Con el ascenso de Larrañaga se renovaron sus Senadores y sus Diputados, y la reciente elección de jóvenes generó una nueva y muy interesante generación de cuadros dirigentes, con una visión más fresca, respaldada por más de cincuenta mil votos. Los sectores partidarios se encuentran en una madura convivencia, mostrando un Partido sólido y unido. No es poca cosa cuando uno observa en la vereda de enfrente los conflictos sectoriales y personales del Frente Amplio.
Al Partido le faltan estructuras de participación ciudadana, que democraticen aún más la toma de decisiones y que actúen como poleas de transmisión con la sociedad y sus diferentes organizaciones. Y estas estructuras deben ser integradas a la vida del Partido, no meras asambleas que hacen como que deciden y cuya opinión no modifica la verdadera toma de decisiones de los órganos partidarios.
En la línea planteada, se debe canalizar la participación juvenil, para que la exitosa convocatoria reciente no se convierta en un hecho aislado que termine generando desencanto. Los jóvenes deben ser protagonistas, ya que la sociedad sólo puede cambiar si una nueva generación, libre de pensamientos sesentistas, con mentalidad productiva y con imaginación, llega para cambiar la cabeza clientelista, estatista-dependiente y derrotera que la que quienes hoy nos gobiernan plantean.
En el relacionamiento institucional, debemos aumentar los vínculos y los diálogos con los diferentes actores protagónicos. Para transformar a los gremios en estructuras que privilegien la defensa real de todos los trabajadores, poniendo énfasis en la generación de empleo y en la mejora de la productividad que acompañe una mejora de los ingresos, por sobre sus vínculos corporativos con el Frente Amplio, debemos tener claro que el cambio es desde adentro, y para eso tenemos que alentar la participación gremial de los ciudadanos independientemente de su filiación partidaria. Con los empresarios, víctimas del discurso de confrontación de la izquierda y de algunos malos ejemplos, no podemos más que caminar juntos, en la búsqueda de aumentar la produción, el empleo y los ingresos de la gente. No existe más en el mundo el concepto de crecimiento desde el aparato burocrático del Estado. La URSS desapareció, China abrió las puertas a la empresa y a los capitales privados, Cuba va languideciendo día a día, y Venezuela, hoy pujante gracias al precio internacional del petróleo, no construye las estructuras que posibiliten el crecimiento para cuando el mismo se acabe. Si no hay inversión privada, y reglas de juego que la estimule, estamos condenados a vivir en la dependencia y en la pobreza. Más claro que los gobernantes de turno lo tienen los uruguayos que día tras día abandonan el país buscando nuevas esperanzas en España, Estados Unidos y Australia.
Necesitamos terminar la construcción de un Partido moderno, dinámico y protagonista, que le imprima al futuro gobierno las mismas características, y que le dé esperanzas a la gente.
Es, como decía Wilson, para que valga la pena.

1 comentario:

Unknown dijo...

Muchos que votaron al frente ,vieron la varita mágica en Tabaré Vazquez.... dificilmente exista un segundo periodo ya que El F.A ganó aqui gracias que todos los que viven en el exterior vinieron a votar mas la gente de aquí que pedia un supuesto cambio.... El Partido Nacional es el cambio que tiene el país para el progreso seguro!
Saludos!